En el momento de la cubrición de las cerdas de una granja, y considerando sólo las primeras cubriciones, es decir, sin tener en cuenta las repeticiones, tenemos dos tipos de animales: cerdas primerizas y cerdas destetadas.
Mientras las cerdas destetadas, en su práctica totalidad, vienen de un estado previo de catabolismo (pérdida de peso-condición corporal durante la lactación), lo que afecta negativamente a todo el proceso posterior, tanto de salida en celo como de mantenimiento de la gestación, las cerdas primerizas no tienen este condicionante previo y teóricamente se cubren en las mejores condiciones. Por tanto, sería esperable que estas cerdas tuvieran el mejor rendimiento.
Sin embargo, tras analizar los datos de la base de datos de ADA (300.000 cerdas), desglosando los resultados de las primeras cubriciones del año 2018 por nº de ciclo, encontramos resultados llamativos.
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